Metros de cielo.

¡Qué grande es el cielo! Cada vez que lo miro, lo pienso. Es grande, gigante, magnífico, enorme... y celeste. Me gusta pensar que desde cualquier parte del mundo podés verlo, tan sólo mirando para arriba, sabés que ahí está (y va a estar, siempre). Supongo (y creo y deseo y espero) que nunca va a extinguirse. Qué pesadilla sería que ¡PUM! no estuviese mas. Pero ¿qué habría en su lugar? Sería imposible. Aparte, ¿qué carajo es el cielo? Realmente no lo sé, y no sé si escuché esa respuesta alguna vez. En The Truman Show, es sólo una tela, es parte de la escenografía. Está bueno pensarlo así; aunque ahora me da intriga qué hay detrás de la tela, quién la puso, y si intentará ocultar algo. Pero en definitiva (sea tela o no) es parte de la escenografía diaria: sin cielo, el día no es día y la noche no es noche, la obra no está completa. ¿A qué clase de dramaturgo se le ocurriría quitar el cielo, cuando representa un día (o noche)? O capaz se le olvidó. Sólo espero que el director, o el escenógrafo, o alguien, se avive y se atreva a darle su toque propio a la obra, y coloque el cielo en donde corresponde (arriba). ¡Cuáááááántos metros de cielo habría que comprar para recubrir TODO el mundo! y habría que ocuparse, cada noche, de encender el lucero y las demás esrellas; de apagar el sol (de bajarle el brillo y luminosidad); de hacer aparecer a la luna. Y después, de revertir todas estas tareas, y que amanezca, una vez más. ¡UF! Realmente, creo que no me simpatizaría estar a cargo del cielo. Pero le agradezco profundamente a quien si cumple con esta tarea: hace un excelente trabajo. Y, de vez en cuando, se la juega y se manda un eclipse, o lo hace figurar a Marte, o algo de eso. Algo hace para que el cielo no sea monótono, no se aburra de sí, y siga siendo infinitamente lindo, interesante y gigante...

¡Qué grande es el cielo!

• "Quiero un pedazo de cielo

para invitarte a dormir..."

• "Donde el cielo se une con el mar,

lejos de aquí..."